En la medida en que el mundo digital avanza, la vida del ser humano se va automatizando y adaptando a los procesos propios de la evolución tecnológica; y es allí cuando caes en cuenta que ya no necesitamos tener dinero en efectivo para realizar pagos, porque es más sencillo y seguro hacerlos con una tarjeta de crédito, débito, o a través de un dispositivo electrónico.
La mayoría de las personas desea ahorrar más dinero, pero son pocos quienes logran desarrollar un plan sólido para fortalecer los buenos hábitos financieros. La vida interfiere y el dinero se escapa. Ahora bien, si tú eres de los que se concentra en ahorrar los excedentes, realizar depósitos automáticos y tienes fuerte resistencia a la tentación de «pedir prestado» dinero a tu cuenta de ahorro, seguramente puedes encaminarte hacia la estabilidad financiera.
Nunca es demasiado pronto para que enseñes a tus hijos la importancia de ahorrar dinero. Desde una edad temprana, a los niños se les presentan numerosas oportunidades para gastar, son influenciados con comerciales de televisión y al depender de sus padres, las prácticas de gasto suelen ser mucho más visibles que las rutinas de ahorro.
Ahorrar es una de las lecciones de finanzas personales más importantes que puedes aprender. Sin embargo, es cierto sigue siendo algo difícil para muchas personas, independientemente de su edad o nivel de ingresos. Con este artículo deseamos darte un punto de vista más amigable al respecto.
Hay muchos sentimientos contradictorios sobre los días festivos, pero en lo único que todo el mundo está de acuerdo es en que si te descuidas puedes gastar mucho dinero muy fácilmente. Ahora bien, con tantas deudas circulando (pagos de préstamos estudiantiles, hipotecas, servicios básicos o facturas médicas vencidas), tu reto es identificar la forma más inteligente de administrar tu dinero.
Una máxima de las finanzas es que siempre debes ahorrar dinero para el futuro. Sin embargo, la lógica dice que al empezar a guardar dinero puedes experimentar algunas dificultades, con este artículo te exponemos algunos pasos para encaminarte hacia un futuro financiero más estable. Después de todo, para que goces de una posición financiera óptima debes percibir y guardar más dinero del que gastas.
Iniciamos un nuevo año, que como es natural, marca para muchos un nuevo punto de partida colmado de esperanza, de propósitos y de objetivos, pero sobre todo cargado de un especial entusiasmo por mejorar todo aquello que reconocemos como nuestras áreas de oportunidad. No obstante deberás considerar que éste año que comienza es electoral y que también estará marcado por un ambiente denso, promoviendo el miedo, la incertidumbre, la polarización y el encono entre nuestra sociedad.
Estamos ya en la temporada de intercambio de regalos, de cajas adornadas que esconden obsequios bajo el árbol de Navidad y de niños que esperan ansiosos la llegada de Santa Claus. Sin embargo, los medios y el consumismo han influenciado tanto nuestra cultura, que los regalos han dejado de ser una muestra desinteresada de afecto, convirtiéndose en compromisos u obligaciones asumidas con los que se pierde el más puro sentido de amor, de altruismo y de entrega que debieran reinar en Navidad.
Un nuevo año es un nuevo comienzo. Una nueva oportunidad para lograr nuestros propósitos, de alcanzar nuestros objetivos, de volver realidad nuestros sueños. Sin embargo también representa incertidumbre y retos desconocidos lo cual es especialmente cierto en este año en el que se vaticina un clima adverso para la economía nacional, lo que seguramente afectará tarde o temprano a nuestras finanzas familiares.
Lo anterior no debe desmotivarnos ¡Al contrario! Los retos impulsan el desarrollo y el crecimiento, tanto del individuo como de la sociedad, teniendo los mexicanos el talento, ingenio y dedicación necesarios para enfrentar los retos que traiga consigo el 2017.
¿El secreto para salir victoriosos? Enfocarnos en aquello que está en nuestras manos controlar, preparándonos – sin angustiarnos – para lo que no lo está.
Si Trump va a disolver o no el TLC, el incremento en el precio de la gasolina que ya estamos viviendo, el deslizamiento del peso frente al dólar y la inflación que todo lo anterior pudiera provocar, son ejemplo de lo que no está en nuestras manos. Al respecto nos queda ser prudentes en nuestras decisiones, principalmente a la hora de adquirir nuevos créditos o solicitar nuevos préstamos.
¿Y qué es lo que sí está en nuestras manos? Fortalecer la economía de nuestros hogares reduciendo nuestros gastos, generando un ingreso extra en nuestro tiempo libre, pagando – o mejor aún, ¡saldando! – nuestras deudas, ahorrando lo máximo que podamos e involucrando a nuestras familias para que participen activamente en éstas iniciativas.
Pero lo más importante es mantener una actitud positiva disfrutando de la compañía de nuestros seres queridos, compartiendo con nuestros amigos, y viviendo los grandes momentos que seguramente traerá para nosotros este año que inicia.
No en balde la felicidad no es una meta, sino la actitud con la que recorremos el camino de nuestra vida.
¡Feliz año nuevo 2017!
