A principios de este mes la CONASAMI (Comisión Nacional de los Salario Mínimos) estableció que para el 2024 el salario mínimo se incrementará a $248.93, lo que representa un 20% de incremento. Si consideramos que la inflación anual al 30 de noviembre fue del 4.32%, representa un incremento del poder adquisitivo del 15.68%. A primera vista podríamos afirmar que es una buena noticia, pero la realidad es que depende de la educación financiera de los trabajadores.
El incremento salarial no mejora la salud financiera
Estadísticamente, cuando una persona ve incrementados sus ingresos, incrementa sus gastos. O peor aún, pensando que ya tiene más dinero para pagar, incrementa sus deudas. Es por ello por lo que, cuando se sube el sueldo a un colaborador, no necesariamente le estamos ayudando a mejorar su salud financiera. Pero, ¿Qué es tener buena salud financiera?
- Tener un ahorro constante, de preferencia el 10% de los ingresos.
- Los pagos de financiamientos (Meses sin intereses, pagos a plazos) representen menos del 20% de los ingresos.
- Que el dinero ahorrado brinde los mayores rendimientos posibles, cuando menos superiores a la inflación.
- No tener deudas, entendiendo por deuda aquel financiamiento que excede la capacidad de pago de la persona, o que los intereses son mayores a sus abonos.
Y es aquí donde la empresa puede ofrecer un diferenciador a sus colaboradores. Un diferenciador que beneficie directamente a sus familias sin representar un beneficio visible – pero tampoco un costo – para la empresa. Esto lo percibe el colaborador como una muestra de un auténtico interés de la empresa hacia su persona, generando lealtad en el equipo laboral.
Estrategia para mejorar la salud financiera de los colaboradores
Warren Buffett, referente obligado en al hablar de ahorro e inversión, señala al ahorro como principio básico para el bienestar económico.
No ahorres lo que te queda después de gastar. ¡Gasta lo que te queda después de ahorrar!
Warren Buffett
De esta manera, al facilitar a los colaboradores el acceso a una Caja de Ahorro como la de ODESSA, realmente les otorgas la oportunidad de mejorar su salud financiera. Hagamos algunos números para ver cómo funciona:
- El incremento al salario mínimo representa 41.49 pesos diarios, es decir, 1,244 pesos mensuales
- Si en vez de entregar ese dinero directamente a los colaboradores, se deposita en la caja de ahorro en el cajón a la vista, el monto que reuniría el colaborador en un año con todo e intereses sería de $15,631.57, suponiendo una tasa anual del 10%.
- Como la Caja de Ahorro de Trabajadores no genera impuestos, el rendimiento para el socio de la caja es neto.
Por otro lado, además de ayudar a tus colaboradores a mejorar su salud financiera, al fomentar en ellos el ahorro les ayudas a alcanzar sus metas personales.
Finalmente, la Caja de Ahorro ODESSA les brinda la posibilidad de consolidar sus deudas en un préstamo personal, con tasas inferiores a las bancarias, y también exento de IVA, lo que representa, con sólo los impuestos, un ahorro del 16%.
Estas son sólo algunas ventajas de utilizar una Caja de Ahorro como estrategia para mejorar las finanzas personales.
La empresa también obtiene beneficios al implementar una Caja de Ahorro
La caja de ahorro es un ejemplo de salario emocional que puedes otorgar a tus colaboradores. Gracias a ello, la empresa obtiene beneficios colaterales en el competitivo mercado laboral actual:
- Mejora la satisfacción de los colaboradores
- Mejora la imagen de la empresa
- Es un diferenciador en el mercado laboral, coadyuvando a la atracción de talento
- Potencializa la retención de talento
En ODESSA tenemos el conocimiento, experiencia y las plataformas tecnológicas para que tus colaboradores gocen de este beneficio, sin que esto te conlleve inversiones importantes en tiempo o recursos, y garantizándote cumplir con las regulaciones vigentes.
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