Vive ahora y ahorra después

En estos días tuve la oportunidad de conversar con una persona (Llamémosle Laura), quien me buscó para que le asesorara a diversificar su ahorro buscando la libertad financiera. Decidí compartirles su caso porque representa las consecuencias de la filosofía de disfrutar del dinero mientras estás vivo, sin ahorrar para el futuro. Hoy, que conmemoramos el día mundial del ahorro, considero que es un buen ejemplo para reflexionar.

A Laura le inculcaron desde pequeña el hábito del ahorro. Buscó ahorrar lo máximo posible de sus ingresos, llegando a tener un capital de varios cientos de miles de pesos. Sin embargo, durante la pandemia su padre falleció a causa del COVID, lo cual le hizo replantearse el tema de ahorro.

«Si no sé si voy a vivir mañana,» – se planteó a sí misma – «¿Qué caso tiene ahorrar en vez de disfrutar de la vida?»

Carpe Diem

A partir de ese momento, y durante los últimos 2 años, compró electrodomésticos para llevar de manera más agradable el encierro, en cuanto pudo tomó una maestría en Europa (corriendo ella con todos sus gastos), e incluso se compró un auto nuevo, cómodo, de alta gama.

¿Resultado? Hoy en día, a sus 58 años, sólo le quedan 35 mil pesos, tiene una deuda cercana al 60% de sus ingresos, y, de pensionarse a los 60 años, sólo recibiría la mitad de sus ingresos (Lo cual no le daría para cubrir siquiera sus deudas)

Citas deudas ahorro libertad financiera Mauricio Priego #MPPh

¿Cuáles fueron mis recomendaciones para ella?

  1. No pensionarse sino hasta dentro de 3 años cuando menos, que es cuando el pago de sus deudas se reduce a la mitad
  2. Tomar los 35 mil pesos e invertirlos en un instrumento de mediano plazo (De tener caja de ahorro de trabajadores ODESSA en su trabajo, le habría recomendado el ahorro a diciembre)
  3. Concretar un fondo de emergencia, el cual debe ser equivalente a 3 meses de gastos fijos (ideal 6 meses)
  4. Con el tiempo que le queda según su propio plan de vida, ya no podemos hablar de que logre ahorrar lo suficiente para vivir de sus rentas, por lo que el único ingreso pasivo será su pensión.

¿Qué podemos sacar de esta historia?

Al no tener ahorros te quedas sin opciones. Terminas viviendo al día, siendo víctima de las situaciones que ocurren a tu alrededor. Cualquier descuido te lleva a endeudarte, alejándote de la libertad financiera.

Por tanto, prioriza el ahorro. ¡Siempre prioriza el ahorro! Y ojo, que no se trata de no disfrutar la vida: Planea aquello que deseas realizar, determinando lo que te va a costar y el tiempo en que quieres lograrlo, ¡Y ahorra para ese objetivo!

Si gustas, puedo ayudarte a definir tu propia estrategia de ahorro e inversión. Para ello contáctame a través de esta liga.

¡Éxito!

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