
Trabajamos para cubrir las necesidades y brindar comodidades a nuestras seres queridos, ¿cierto? Lo anterior no tienen nada de malo sino al contrario: es digno de reconocimiento el esfuerzo y sacrificio que diariamente realizan padres y madres de familia por los suyos. Pero hay que tener cuidado, ya que la cultura en la que vivimos inmersos nos lleva con facilidad a auto-engañarnos haciéndonos creer que tenemos una buena calidad de vida cuando en realidad dedicamos nuestro tiempo – y recursos – a mantenerla a toda costa. Leer más