Un nuevo año. Nuevas oportunidades y metas por alcanzar… Emocionante, ¿no crees? Entre estas metas se encuentran los propósitos de año nuevo como empezar a hacer ejercicio, poner un negocio o bajar de peso. Aprovechando que estamos estrenando el año, repasa tu lista de propósitos. ¿Se encuentra entre ellos el ahorro? Leer más
Categoría: Ahorro
Saca 10 en la compra de útiles escolares durante el próximo regreso a clases
¡Por fin! Las clases han acabado y los estudiantes han comenzado a disfrutar de sus vacaciones. Más para los padres de familia ha empezado uno de los períodos escolares más complicados financieramente hablando: la compra de útiles y uniformes escolares. ¿Que aún falta tiempo para que los chicos entren a clase? En realidad no tanto si consideramos que sólo son unas cuatro semanas, es decir, un par de quincenas, por lo que lo mejor es aplicarse y comenzar a planear este gasto necesario para evitar descalabros financieros en agosto.
1) La lista de útiles escolares
Para poder planear es necesario saber cuánto habremos de gastar. Por lo que te ayudaría y mucho conocer la lista de útiles escolares de una vez para poder distribuir la compra entre los períodos de pago que tengas, de manera que puedas comprarlos poco a poco. Si la escuela donde inscribiste a tus hijos no ha entregado todavía la lista de útiles escolares, consulta las de años pasados con conocidos, amigos e incluso en Internet y compra los productos que observes se piden año con año.
Existe un caso especial: Escuelas que ofrecen a los padres comprar los útiles y libros en la escuela. Si la escuela ofrece este servicio no dudes en tomarlo, ya que usualmente resulta muy económico debido a que la papelería/librería contemplan la venta como un pedido al mayoreo (a mayor volumen, menor precio), además de ahorrarte tiempo y gasolina al evitar estar yendo de un lugar a otro buscando los diferentes productos en la lista y los mejores precios (es común que no encuentres todos los útiles y libros en un mismo lugar, y que mientras ciertos productos son más baratos en un sitio, otros lo son en otro).
2) Aprovecha los mejores precios
Mientras más se acerque el inicio de clases, más librerías, papelerías e incluso supermercados y tiendas de conveniencia estarán promocionando y ofertando los útiles para el nuevo ciclo escolar. En ese caso, ¿Cómo conseguir los mejores precios?
Sigue un principio básico de los compradores inteligentes: Haz tuyo el hábito de fijarte en los precios de los productos cada vez que visites un comercio. Con ello tendrás una idea clara de dónde los productos son normalmente más baratos y dónde más caros, de manera que llegado el momento podrás diferenciar las ofertas reales de las ficticias.
3) Únanse entre varios para comprar al mayoreo
Actualmente existen tiendas especializadas en artículos y productos de oficina donde pueden comprarse útiles escolares. También hay papelerías que ofrecen precios especiales al comprar en volumen. En ambos casos el único «pero» es que se tienen que comprar cantidades altas de los diferentes productos: Paquetes de tijeras, paquetes de lápices, paquetes de lápices adhesivos… Para un solo estudiante – y aún para una sola familia – quizá sean cantidades demasiado grandes como para que valga la pena. Pero si te asocias con familiares, amigos, o padres de compañeros de tus hijos, es posible que puedan comprarlos aprovechando los precios reservados a mayoristas para después dividirse entre ustedes los útiles así como el costo de los mismos.
4) Has sinergia con tu empresa
Es posible que tu centro de trabajo tenga hoy acuerdos con alguna papelería para conseguir mejores precios en productos de oficina, en cuyo caso los precios que otorgan a tu empresa son bastante menores a los que podrías conseguir tú de forma independiente. Adicionalmente, existen empresas que como apoyo a sus colaboradores les ofrecen poder comprar a través del departamento de compras los útiles escolares que requieran, descontándoselos después vía nómina en algunos casos, o requiriendo el pago al momento de entregar los útiles en otros.
Si en tu centro de trabajo no tienen esta facilidad, proponle la idea a tu patrón o al gerente de compras. Como diría mi abuela, el no ya lo tienes… Y quien quita y apoyen tu iniciativa.
5) El financiamiento de los útiles y uniformes
Los puntos anteriores han versado sobre cómo conseguir mejores precios… Pero, ¿qué hacer para pagar sin que sea muy agresivo para tu bolsillo?
- Mi favorita: Genera un fondo de ahorro (provisión) para compra de útiles, de manera que cada vez que cobres separes una cantidad pequeña con ese fin. El monto a ahorrar sería el resultado de dividir lo invertido el último año escolar en útiles y uniformes entre las 24 quincenas que tiene un año. Este fondo podrías resguardarlo en tu cuenta de la caja de ahorro de trabajadores, donde obtendrías además rendimientos por tu dinero.
- Otra opción se basa en que hay escuelas que sólo cobran 10 meses de colegiatura. Si en tu presupuesto has considerado las colegiaturas como un pago mensual, destina los meses 11 y 12 para la compra de útiles y uniformes (y de sobrar dinero, podrías ahorrarlo como parte del fondo para los estudios superiores de tus hijos).
- Si eres totalero (que siempre saldas tu tarjeta de crédito), ésta también puede ser una buena opción: Compra los útiles una vez que se haya realizado el corte de tu tarjeta, de manera que tengas dos catorcenas para cubrir la compra y no pagarle así un peso de intereses al banco.
- Para oportunidades futuras considera tu PTU. Es una buena inversión destinar una parte del reparto de utilidades que recibes en Mayo para la compra de útiles escolares de tus hijos.
- Ya hemos mencionado la posibilidad de comprar los útiles a través de tu empresa de manera que ésta te descuente vía nómina su costo. En este caso sólo confirma que efectivamente podrás absorber este nuevo compromiso financiero para no acabar endeudándote por falta de liquidez.
- Evita comprar los útiles en sistemas de «pagos chiquitos» – incluyendo FONACOT -, ya que usualmente esconden tasas de interés muy altas por lo que te termina saliendo muy caro.
- En el caso de «mensualidades sin intereses» te sugiero mantener la disciplina de confirmar en tu presupuesto, antes de comprar, de que en verdad podrás absorber los pagos de manera que no te termines endeudando.
- Para finalizar tenemos los préstamos solicitados a tu caja de ahorro para trabajadores, donde la tasa de interés normalmente es muy baja respecto a bancos y otras fuentes de financiamiento, además de poder pagarlas vía nómina. Nuevamente confirma primero con tu presupuesto que en verdad puedas absorber estos pagos.
¡Éxito!
Cuatro pasos para convertir los Gastos Hormiga en una fuente de ahorro
¿Has oído hablar de los «Gastos Hormiga«? Son aquellos gastos pequeños que hacemos y a los que usualmente no damos importancia, pero que significan a la larga una fuga de dinero. Refrescos, periódicos, chicles, dulces, botanas… productos que cuestan normalmente alrededor de $10, pero que con sólo comprar uno diario camino al trabajo, ya estamos hablando de $300 al mes, cantidad nada despreciable para ahorrar, ¿no crees? Y con una tasa promedio de un 4% anual que podrías conseguir en tu caja de ahorro para trabajadores, estamos hablando de que en el transcurso de un año podrías llegar a alcanzar cerca de $3,680.00 gracias a los intereses. ¿Te imaginas? Existen muchos gastos hormiga y definitivamente tiendas y comercios están diseñados para incentivarlos casi sin que te des cuenta, pero es posible detectarlos y evitarlos siguiendo una estrategia sencilla. Leer más
¿Por qué cuesta tanto trabajo ahorrar?
Hace tiempo, platicando con una amiga, me hacía esta pregunta. Y lo que hace especialmente interesante a la pregunta es que muchas personas ahorran en estos momentos de forma cotidiana, mientras que muchas otras no encuentran la forma de hacerlo… y esto sin importar su nivel de ingresos o su educación. Una respuesta inmediata es que cuesta trabajo ahorrar porque no se ha adquirido el hábito del ahorro, mas en lo personal considero al ahorro más como una habilidad que como un hábito, siendo ésta una de las principales habilidades financieras a desarrollar para alcanzar y mantener tus finanzas personales sanas, así como para avanzar en el camino hacia la libertad financiera.
Pero, ¿cuál es la diferencia entre “hábito” y “habilidad”?
Mientras un hábito se adquiere por la repetición de la misma acción, una habilidad es la destreza que se tiene para llevar a cabo esa acción.
Pongamos un ejemplo: Tener el hábito de leer – altamente recomendable por cierto – significa que la persona de forma cotidiana lee libros, revistas, o artículos de su interés sin requerir realizar un esfuerzo especial para hacerlo, siendo algo natural en sus actividades cotidianas. Pero para poder adquirir el hábito de leer, la persona tiene primero que saber leer, o lo que es lo mismo, tener la destreza de interpretar los símbolos impresos identificando letras, palabras y oraciones dándoles sentido. Y si se pregunta a los lectores que realmente disfrutan la lectura, no sólo tienen la capacidad de interpretar correctamente lo escrito, sino que adicionalmente lo visualizan, lo imaginan, ¡lo viven! Y claro está, es más fácil desarrollar el hábito de la lectura para quien disfruta hacerlo, que para quien aún requiere aprender a hacerlo.
En el caso del ahorro, la destreza que se requiere desarrollar es separar de tus gastos ordinarios una cantidad la cual debe ser resguardada para su utilización futura, ya sea para cubrir alguna necesidad (provisiones y reservas) o para realizar proyectos o alcanzar objetivos (fondos de ahorro). Una vez adquirida la destreza de ahorrar, será más fácil convertirla en un hábito.
Ahora bien, ¿cómo adquirir la habilidad de ahorrar?
- El primer paso es reconocer que todos, sin excepción, sabríamos en qué gastar un dinero adicional que obtuviéramos. Al mismo tiempo, si por cualquier motivo nuestro ingreso se redujera un poco, no nos moriríamos de hambre logrando salir adelante ajustando nuestros gastos. Es decir, reconocer que nuestros gastos se expanden y reducen de acuerdo a nuestros ingresos;
- El segundo, es tomar la decisión de reducir voluntariamente nuestros disponible – cual si se redujera nuestro ingreso – separando antes que cualquier otro gasto el monto destinado al ahorro;
- Ya tomada la decisión, lo siguiente es definir cuánto será el importe que destinarás al ahorro siendo recomendable que lo reflejes en tu presupuesto (si aún no llevas un presupuesto, te recomiendo el artículo 10 consejos para la elaboración de tu presupuesto). De ser el caso podrías empezar por el 5% de tu ingreso con el objetivo de generar un fondo para tu retiro o 2% de tu ingreso para la creación de un fondo de emergencias;
- Deposita el dinero ahorrado en una cuenta separada de aquella de donde retiras el dinero para tus gastos (Latas de galletas y alcancías son soluciones temporales);
- De tener caja de ahorro en tu trabajo ,solicita la retención vía nómina de tu ahorro o programa la transferencia automática del monto correspondiente. Con esto “no verás el dinero” evitando tentaciones;
- Olvida que tienes ese dinero ahorrado. No lo consideres si te salen gastos no contemplados, o te piden útiles adicionales en la escuela de tus hijos, o hay una fiesta y necesitas llevar un regalo o no encuentras que ponerte. Únicamente utilízalo para las necesidades u objetivos que desde el principio hubieses destinado.
- Finalmente, evita vivir a expensas de la tarjeta de crédito o préstamos. Si no te alcanzan tus ingresos, lo recomendable es no adquirir los productos o servicios que deseas sino hasta que hayas generado un ahorro o un ingreso que te lo permita, o cuando menos que te garantice un flujo de efectivo tal que te permita cubrir la deuda manteniendo tus finanzas sanas.
Y si ya se tiene la habilidad, ¿se puede adquirir mayor destreza?
Por fortuna, uno de los grandes dones que tenemos los seres humanos es que siempre habrá la oportunidad de mejorar nuestra destreza en cualquier actividad que realicemos. En el caso del ahorro éstos podrían ser algunos de tus primeros objetivos:
- Desarrollar tu propia estrategia de ahorro, para lo cual
- Conoce los diferentes instrumentos de ahorro a tu disposición,
- define objetivos de ahorro planeando y previendo el futuro,
- identifica los plazos de tus objetivos para así utilizar los instrumentos de ahorro que te darán mejores rendimientos.
- Dar preferencia al ahorro cuando tengas ingresos inesperados sobre el gasto diario o sobre la adquisición de productos y servicios.
- Desarrollar la habilidad de proteger tu dinero (optimizar gastos, adquirir coberturas de seguros) para así generar ahorros, dando prioridad, nuevamente, a depositar ése dinero en tu cuenta de ahorro sobre usarlo para cubrir gastos.
- Incrementar el rendimiento de tus ahorros a través del ahorro a largo plazo u otros instrumentos de inversión.
Al igual que leer o montar en bicicleta, es probable que en el primer intento no logres adquirir la habilidad, de forma que no separes de tu ingreso el dinero destinándolo todo para el gasto y pago de deudas, o utilizando para otros fines el dinero que tenías ahorrado. Más al igual que en la bicicleta, sólo levantándote y volviendo a intentarlo con perseverancia, determinación y compromiso a pesar de las heridas, lograrás no sólo ahorrar, sino hacerlo con destreza, volviéndolo un hábito en tu vida financiera.