En días recientes, ha cobrado fuerza una palabra que para muchos solía parecer lejana o poco relevante, pero que tiene consecuencias muy reales en nuestra economía del día a día: aranceles.
A raíz de las declaraciones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sobre imponer o elevar aranceles a productos mexicanos, es natural que surjan preguntas como: ¿Cómo afectan estas medidas a México y, más importante aún, a nuestras finanzas personales?
¿Por qué deberían interesarnos los aranceles?
Los aranceles son impuestos que un país aplica a productos importados, es decir, a bienes y servicios que se producen en el extranjero y se venden dentro del país. En este caso, si Estados Unidos decide imponer o aumentar aranceles a productos mexicanos, muchas exportaciones nacionales se encarecerían para el consumidor estadounidense.
Esto podría traducirse en una baja en las ventas, afectando directamente a empresas mexicanas, lo cual tiene un impacto directo en el empleo, los salarios y los beneficios de miles de personas.
Pero los efectos no terminan ahí. Los aranceles también pueden provocar aumentos en los precios en México, especialmente si involucran insumos o materias primas que forman parte de las cadenas de producción. En consecuencia, decisiones a nivel internacional pueden reflejarse en el precio de la canasta básica, el transporte, la tecnología o incluso la ropa que usamos todos los días.
¿Cómo puede afectarte en tu vida cotidiana?
En contextos de incertidumbre económica o posibles tensiones comerciales, las empresas suelen aplicar ajustes para mitigar riesgos, entre ellos:
- Incremento en los precios de productos o servicios.
- Revisión de presupuestos y reducción de gastos.
- Congelamiento de contrataciones o disminución de sueldos y prestaciones.
- Reducción de inversión en programas de bienestar para los colaboradores.
Este tipo de medidas generan un entorno de inestabilidad financiera que puede afectar directamente a las personas y sus familias, sobre todo si no cuentan con herramientas que respalden su economía a mediano y largo plazo.
¿Qué puedes hacer para prepararte?
La buena noticia es que sí hay acciones concretas que puedes tomar desde hoy para fortalecer tu economía personal ante la incertidumbre:
- Fortalece tu ahorro: Si en tu empresa cuentas con Caja de Ahorro o Fondo de Ahorro operado por ODESSA, úsalo de forma estratégica. Es una excelente forma de generar un respaldo económico sin que represente un gasto adicional.
- Reduce gastos innecesarios: Haz un análisis de tus finanzas y elimina aquellos consumos que no son prioritarios.
- Invierte en tu educación financiera: Comprender cómo se mueven los mercados y cómo afectan decisiones internacionales tu bolsillo te permite tomar mejores decisiones.
El valor de los beneficios en tiempos de incertidumbre
Cuando el panorama económico se vuelve incierto, contar con beneficios sólidos puede marcar la diferencia. Las empresas que apuestan por ofrecer beneficios y prestaciones no solo brindan tranquilidad financiera a sus colaboradores, también logran retener talento, motivar a su equipo y generar confianza, incluso en tiempos difíciles.
En ODESSA somos expertos en la operación e individualización de cuentas de Cajas de Ahorro, Fondos de Ahorro y Planes de Pensiones para colaboradores, y nuestro compromiso es ayudarle a las empresas a tomar las mejores decisiones en función de sus necesidades y la seguridad de los recursos de sus trabajadores.
Si eres una empresa interesada en fortalecer las finanzas de tu equipo, escríbenos a ventas@ods.com.mx. En ODESSA te ayudamos a cuidar lo más valioso: el bienestar de tus colaboradores.